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23,66 €La historia más original, polémica y definitiva sobre la Revolución Rusa en el año de su centenario.Cuando se cumple su centenario, la Revolución Rusa aún ejerce una poderosa atracción sobre la imaginación polÃtica. La fe en el marxismo-leninismo inspiró a millones de personas en el siglo XX, y el espectro del comunismo aterró a otros millones más. Incluso hoy, un cuarto de siglo después de la caÃda de la Unión Soviética, el legado de Lenin perdura. El Partido Comunista todavÃa gobierna en China. En la penÃnsula de Corea, la Guerra FrÃa se niega a morir. El Occidente «capitalista» ha visto un resurgimiento de la fe marxista como consecuencia de la crisis mundial de 2008, apenas una generación después de que la esquela de Marx pareciera estar escrita en la caÃda del muro de BerlÃn.Sean McMeekin recrea vÃvidamente la atmósfera de 1917, y explica lo que realmente pasó en Rusia bajo la presión de la guerra mundial. Lejos del «conflicto de clases» de la leyenda marxista, la Revolución surgió a partir de una particular mezcla rusa demagogia polÃtica, motÃn, furia popular y, no menos importante, incompetencia del gobierno. Aprovechando la agonÃa de Rusia, embolsando subsidios alemanes mientras se defendÃan de las acusaciones de traición, Lenin y los bolcheviques le pusieron su sello propio de fanatismo a la Revolución, tomando el poder y dictando decretos dirigidos a abolir cualquier tipo de la propiedad privada. Aplicando polÃticas más radicales de lo que ningún socialista hubiera soñado, los bolcheviques cautivaron el mundo y produjeron una catástrofe económica sin precedentes.